LA BALADA ETERNA DE LEO MESSI

Creé este blog en Mayo de 2011 con un artículo dedicado a Leo (MESSI, PETER PAN EN WEMBLEY). Un jugador de otro mundo, como bien reza en la cebecera de este blog. Perdí las ganas de escribir tras su marcha, forzada por la negligencia de una directiva que, con fichajes erróneos de entrenadores y jugadores, desaprovechó al menos un lustro de este extraterrestre que, con haber tenido un equipo sólido en defensa, hubiera seguido ganando ligas y champions como churros. Hoy tengo el gozo de poder glosar una hazaña que mucha gente canta, pero que a pocos veo calibrar en su veradadera dimensión, que es gigantesca, y a la vez bastante fácil de argumentar con brevedad.  

Veamos. No creo que casi nadie esté en desacuerdo en reconocer que Messi, a sus 35 años, tiene un poderío físico, tanto en lo referente a velocidad, como sobre todo en resistencia para mantener largos sprints y repetirlos, que no llega ni al 50% de cuando estaba en su máximo esplendor físico. Pues bien, al 50% de su potencia, Messi ha sido el mejor jugador del mundial con mucha diferencia respecto al siguiente, sea quien sea (Mbapé, Griezman, Modric, Bellingham, Shaka... etc.) Y además, ha llevado a Argentina a la victoria. ¡Se dice pronto!...Porque si tú, por ejemplo, dejas a Cristiano, Mbapé o Haland al 50% de su potencial físico, es muy probable que ni siquiera fueran seleccionados en sus países... Ahí está la diferencia entre los poquitos extraterrestres que en el mundo han sido, y los grandes jugadores que nunca pasarán de terrenales. Porque la categoría de ET, al menos yo, sólo se le puede dar a tipos con un talento descomunal para marcar y/o generar goles y jugadas imposibles para el resto. De ahí que sólo hablemos de Pelé, Cruyff, Maradona, y Messi. Aunque yo añadiría en un escalón inferior a Romario, que seguía metiendo golazos hasta sin entrenar, a Ronaldo Nazário, que seguía siendo el mejor jugando en el Madrid con 10kgs más y dos rodillas menos, y a Ronaldinho, que ha sido el jugador más divertido que yo he visto en un campo de fútbol, y que seguía levantando de los asientos al personal en esos añitos en los que se dio a la juerga.

En todo caso, para mí es obvio que Messi es el más grande de la historia, y que sólo Pelé puede plantearse mirarle a los ojos en algo tan importante como nº de goles, % de golazos, jugadas de gol generadas, títulos ganados, y nº de años de excelencia. Ni Maradona, con una zurda tan talentosa o más que la de Messi, ni Cruyff, pueden siquiera aproximarse a los números de un tipo que, con una clase descomunal, ¡ha marcao 500 goles más que estos dos! Por tanto, para mí se acabó ya un debate que era apasionante al versar sobre jugadores de época. Lo de comparar a Leo con Cristiano o con Mbapé (mucho más talentoso que CR7) me parece como comparar a Mozart con Richard Clyderman, o sea, una obscenidad. Y eso que el francés tiene destellos de Ronaldo Nazário en su potencia bestial, e incluso tiene una notable precisión en el chut lejano a puerta. Pero de ahí a inventar fútbol como los grandes, hay un trecho pues hay que nacer con ese don.

Respecto al Mundial de Qatar, decir que Argentina es el único equipo que ha merecido ganar todos los partidos, incluido por supuesto el perdido ante Arabia. Y que ha sido incluso emocionante verles levantarse tras ser forzados a prórrogas injustas ante equipos muy superiores físicamente como Holanda y Francia. Y Escaloni ha conseguido el exitazo con una fórmula que le hubiera dado a Argentina varios mundiales y varias Copas de América más, y que es la misma que montó Bilardo para Maradona en el 86: un equipo rocoso en defensa con todos dejándose la vida para dejar que el 10 invente jugadas de gol. Eso sí, Maradona era un ex-jugador desde los 30 dada su vida autodestructiva. Y Messi nos ha dejado una obra inolvidable con 35. Aun así, que nadie olvide que, a pesar de que hasta ahora Leo jamás tuvo a un Dibu salvador, ni un Julián Álvarez que corriera por tres, ni un trío fortísimo de centrocampistas como Enzo, Macalister y De Paul, la suerte sigue siendo clave en cualquier torneo de Copa. En Brasil 2014 Argentina, con aquel Messi que tenía vómitos desde hacía meses, mereció ganar, y se quedó a 5 minutos de los penaltys tras un penalty clamoroso de Neuer al Pipa, y tras fallos increíbles del propio Higuaín y de Palacios. Esos fallos tremendos ante gol que ¡tuvo también Lautaro en la prórroga! Menos mal que el tal Kolo Muani no clavó la que tuvo. Y que, por fin, Di María jugó una final de un mundial, y además dio un recital. 

La Final fue una exhibición argentina de entrega y de fútbol, ante una Francia a la que se le apareció Otamendi en su único fallo en Qatar. A partir de ahí, Mbapé metió un golazo del carajo, y Francia llegó en plan gallito a la prórroga, con un plantel de atletas de color que daba miedo. Hubiera sido de justicia poética que ese obús de Messi antes de la prórroga hubiera sido el broche de oro. Y sin embargo, aunque Argentina sorprendió tomando el mando de nuevo en esa prórroga, ocurrió que, dada la alucinante ineficacia de Lautaro ante gol, los gabachos rondaron el gol un par de veces... Y Mbapé no puso la puntilla en el último segundo de la prórroga porque Dybala le robó in extremis la posibilidad de culminar una jugada que, esta vez sí, fue de extraterrestre, y que hubiera sido su injusta consagración ante un Messi decisivo en todas las fases del Mundial. 

En fin. Bien está lo que bien acaba. O mejor dicho, lo que bien sigue. Porque, como dijo Valdano, "la intensidad se ha apoderado del fútbol, y de pronto la revolución la ha hecho un tipo que camina"... Un tipo que, desde la más absoluta humildad, lleva más de tres lustros componiendo una Balada Eterna que dudo que alguien pueda siquiera aproximarse a emular, porque cada control, cada amago, cada pase, cada regate, cada disparo suyo, es una obra de arte. Ojalá nos regale unos añitos más. Ahí va un enlace con esas cositas que nos ha dejado en su paso por Qatar:  Jugadas de Messi en Qatar

Saludos y Feliz Navidad