EL BARÇA ES LÍQUIDO, NO SÓLIDO

Esto no viene de ahora. Son muchos años de defensa inconsistente, a los que se le añade ahora la falta del Messi salvador de tantos partidos. Porque los talibanes de Menregolandia obvian que, tras las salidas de gente como Puyol, Xavi, Iniesta o Neymar, Messi mantuvo al Barça en la pomada de la Liga, Copa y Champions, ésta última una y otra vez hasta cuartos o semis. Siempre. Pero la mafia mediática consiguió opacar los recitales de Leo ante el Liverpool en Barcelona o ante el PSG en París, para culparle de derrotas que sólo han sido achacables a un equipo "líquido", que no "sólido". Y la pena es que teniendo tantos años al mejor de siempre, la mera inyección de solidez le hubiera dado al Barcelona otras dos o tres Champions como poco.

Que toda una empresa gigantesca como el Barça, que factura 1000 kilos, y que tras la época Guardiola, juntó a la MSN, fuera incapaz de fichar un digno sucesor de Puyol o Alves, o de retener a Neymar, ya me parece negligente per se. Pero que se gastasen 120 Kilos en Coutinho y otros tantos en Griezman, ya supera el concepto de negligencia. Porque esos son los males cronificados: incapacidad profesional para fichar meros especialistas en puestos defensivos que hagan al Barça muy difícil de batir, y derroche indecente de millones en supuestos cracks en ataque que no tienen ni velocidad, ni cambio de ritmo, ni dribbling, ni nada que les asemeje a un proyecto de crack. Y si lo tuvieran me callaría, como el caso de Dembelé, que es un jugador diferente por el que uno comprende que se apueste fuerte, ya que en un día bueno puede destrozar a cualquier defensa del mundo.

Dicho eso, y a pesar de la depre que me provoca la marcha de Messi y la continuidad de Koeman, torpe hasta almorzar y después todo el día, la plantilla del Barcelona no es tan mala como se vende, aunque esta transición es dolorosa por la insolvencia defensiva crónica, agravada por las decisiones de un entrenador que auto eliminó al Barça en Champions con una táctica indecente ante la Juve y el PSG en el Camp Nou, ambos equipos inferiores al Barcelona simplemente plantando al equipo en el campo como Dios manda, tal y como se vio en Turín y París... Y en la Liga tres cuartos de lo mismo, pues el lastre de principios de temporada, originado en sistemas defensivos infames, se vio rematado por ese par de partidos al final de Liga, en que no acompañó la suerte tras una remontada fantástica. Pero siempre con el mismo telón de fondo: INCONSISTENCIA DEFENSIVA. Cada vez que llega el rival al área es medio gol.

Y es que uno tiene que alucinar con la mala vista fichando, y con las tonterías de Koeman. ¿Para qué coño le sirve al Barcelona un defensa bajo de estatura y lento como Eric, si hasta Piqué nada en la obsolescencia cuando no está al 100% de físico y de concentración? ¿Para qué un armario como Luuk de Jong si la clave del fútbol moderno es la VELOCIDAD? ¿Cómo coño puedes dejar fuera en Portugal a Mingueza, el único defensa vocacional y rápido que tiene el Barcelona junto a Araujo? ¿Cómo puedes quitar a Piqué a la media hora por una tarjeta y anular al único jugador que estaba rompiendo líneas y generando ocasiones que era Frank de Jong?

La plantilla del Barcelona no es tan mala, sobre todo si se recuperan Fati y Dembelé. Mereció irse al descanso incluso ganando, pero el primer gol encajado retrata esa realidad a cámara lenta de Eric y Piqué. La lentitud lastra a este equipo, y sólo puede maquillarse con una táctica cuasi perfecta en la que el dinamismo de gente como Gavi o Niko arropen al veterano Busquets, y la exuberancia física de Mingueza y Araujo hagan lo mismo con Piqué. Sólo así pueden brillar el, por ahora, sobrevalorado Pedri, y el genio intermitente Depay. Pero todo eso sólo es factible con un entrenador que no la cague ni en el once titular, ni en los cambios, donde es difícil encontrar alguien más torpe que Koeman.

Así veo yo a este Barcelona post-Messi. 

- No me gusta Ter Stegen ni el 20% que a la gente, pues va fatal por arriba, retiene cada balón sin organizar una contra el 95% de ocasiones, y tiene problemas de visión en tiros lejanos. Juega muy bien con los pies, pero se lo cree y no pocas veces arma ciscos con errores graves por arriesgar más de la cuenta.

- Los laterales, salvo Mingueza, son balas en ataque y coladeros en defensa.  A Jordi Alba le sale positiva la ecuación porque es una máquina de asistir. A Dest todavía no. Ver a Sergi Roberto de lateral me pone literalmente malo. 

- El mediocampo sólo chuta cuando Busquets tiene alrededor a la gente correcta posicionalmente, y a De Jong en modo "vertical". Pedri tiene que ir a más pues es un niño. Clase le sobra, pero hay que plasmarla en generar goles. Lo de Gavi promete porque es dinámico y tiene reprís. A Niko hay que rodarle porque tiene muy buena pinta. Un tipo del perfil de Paulinho daba consistencia y opciones de ataque, pero los "lumbreras" del club no le retuvieron sin traer otro similar.

- Una delantera en forma con Dembelé, Depay y Ansu Fati es de las mejores del mundo. Pero si metes 2 y te cuelan 4 no hay nada que hacer. 

En definitva. El Barcelona, aparte de que las lesiones respeten a su gente clave, cosa fundamental en cualquier equipo, depende más que nunca de la destreza de un entrenador para montar un esquema defensivo solvente. Tiene la dificultad de que sólo dos jóvenes como Araujo y Mingueza tienen brío defensivo, junto a Piqué cuando no tiene esa empanda que de vez en cuando cristaliza en goles rivales. Algo parecido le pasa a Lenglet, pero ni él ni Eric tienen la velocidad que se requiere para jugar en un equipo grande que vive en campo rival.

El Barça no es tan malo como parece. Si acierta con un entrenador que no atente contra la lógica, podría luchar por la Liga. Y a pasar la fase de grupos también, aunque ahora se vea todo negro. Tangamos en cuenta que al Barcelona no le tocan "Sheriffs" en los sorteos. Y por eso cuando le dominan un rato, le marcan goles. Al Madrid le pasa lo contrario. No es ni la mitad de lo que venden los locutores, que cobran por masturbar mentalmente a la masa merengue. Pero al Real Madrid le toca siempre la lotería. En los sorteos (jamás le toca el ogro de la clase), en la potra en partidos en los que es bailado (1ª parte en Milán o ante el Villarreal), en los resultados ajenos (cada vez que palma empatan los otros dos del grupo), y en los arbitrajes rescatadores de tantos partidos (ayer lo intentó con ese pseudo penalty a Vinicius). Eso sí, muchos son tan chulitopiscinas, que se engallan por meterle 6 al Mallorca o por salvar puntos en los descuentos, y no tienen rubor alguno en ir de "favoritos" tras merecer la derrota ante el Inter, y ser incapaces de meter un gol legal al equipo más desconocido del torneo. ¡Se lo creen tú! Y eso que vienen de otro Nadaplete. 

En fin. Lo de siempre. El cenizo culé, y el chulito merengue. Si ya era así cuando el Barça les meaba una y otra vez en cada clásico y ganaba Liga tras Liga, imaginad ahora que el Barça anda sin red y te refrotan una y otra vez los 8 del Bayern... Lo que callan es que el Chelsea no les metió 7 en la ida y otros tantos en la vuelta por esa dosis cuasi esotérica de potra que maquilla cada ridículo del club más prepotetente y con la vitrina más falsa de la historia del deporte mundial.

Señores merengolos... Un poquito de por favor. Tras palmar con el Sheriff, uno se calla como una puta unos días, y se tapa un poquito. Por mera vergüenza torera. Esto no ha hecho más que empezar. ¡Bobos!