LEO MESSI: RETURN TO NEVER LAND

Cuando el Barça volaba a Milán, ni Rappel leyendo la mano a Roncero tenía cojones de predecir los veinte días deprimentes que se venían encima. Pero en San Siro se reunieron todos los duendes tocahuevos propios y ajenos. Desde el césped jodido al puto árbitro escocés... y la efectividad total a la milanesa. La hostia fue de tal calibre, que se perdió ese punto de ilusión sin el que no hay futuro alguno. Recuperadas las constantes vitales con el 4-0 al Milán, el Barça sigue líder a 13 puntos de un "lobby de poder" al que le han pitado un penalti en contra en dos años y al que le perdonan una roja por partido. Es ese lobby que mereció perder en Coruña (por goleada), Manchester o Vigo. Por eso es ahora, y no con el ventajismo derrotista de los agoreros, cuando conviene analizar bien de dónde viene este Barça y hacia dónde va.
 

Grande Samuel

Guardiola creó un equipo pluscuamperfecto a partir del "milagro Messi". Pero Pep no era infalible. Cuando llegó, tenía prisa por vender a Eto’o, pero no pudo... Y menos mal, porque Samuel fue vital en el Sextete, y le vino que ni pintao a Messi, que en aquella primavera del 2-6, pasó a jugar de falso nueve, con un currante camerunés de superlujo desbrozando rivales, y abriendo latitas como la Final de Roma. Ese añazo llevó también la firma del un supreclase como Henry, y del gran Yayá Touré, que aguantó al equipo en Stamford Bridge y en Roma como lo que es, un Titán.

Rozó la perfección...salvo fichando fuera

A partir de ahí Guardiola llevó la batuta del fútbol mundial con una excelencia jamás lograda por nadie. Y aplicó su máxima: para mantener el nivel, hay que reemplazar gente cada año, deportivamente y "ecológicamente"… Pero demostró gran torpeza fichando fuera. ¿Alguien imagina el paseo de este Barça si en vez de Hleb, Cáceres, Chigrinsky, Ibrahimovic, Alexis y Cesc se hubiera fichado, por ejemplo, a Thiago Silva, Kun Agüero, Ribéry, Lucas Moura y Ozil? Nombro al alemán porque, aparte de superclase, lo tenía atado Rosell, y Pep prefirió a Cesc. ¿Convicción personal? ¿Regalo a Messi por su amistad desde la infancia? Hoy creo que al traerle activó una bomba de espoleta retardada. Ojalá me equivoque. Empieza a ser un axioma que cuando él juega el rival supera el medio campo blaugrana con la minga.

Pero volvamos a Guardiola. Hablamos de manejar un grupo de críos forraos de pasta para que se dejen los huevos entrenando y no pierdan un ápice de concentración en un sistema que te penaliza a poco que desbarres, pues vives al borde del área rival. Al principio todo el mundo se enchufó, y más viendo que se estaba haciendo historia, y que había un marciano que solucionaba cualquier papeleta llamado Lionel. Como la cosa alcanzó magnitudes de Leyenda, la inercia era acojonante. Parecía imposible que al Barça le ganase nadie en Europa, y no hubo un solo equipo que le superase en fútbol ni de lejos. Ni Inter ni Chelsea llegaron siquiera a rozar de lejos el prestigio del Pep Team. Se habían ganado 2 Champions en 4 años, pero en fútbol y hegemonía se había arrasado en las cuatro.

Pero hay que acertar en los fichajes, porque si vienen curvas y los nuevos no rulan, mal negocio. Ya fue la hostia salvar el año de Ibra porque no era jugador para este sistema, y más con Henry desconectado tras saciarse con el Sextete. Benquerença hizo el resto, pero terminar muriendo en la orilla ante el Inter con Ibra y Henry en el banco, certificaba el fracaso de no haber elegido bien los cracks para ese año.

El 2010-2011 de Pedro...Impresionante

La llegada de Mou con sus bajezas fue "superdoping" para el vestuario.  Además Pedro, sin ser un crack, firmó un año imponente, y Villa cumplió bien. Sólo Undiano evitó otro Sextete al perpetrar el atraco “a patadón armado” de Valencia. La gente pasó del robo porque Wembley sacramentó la Leyenda del Barça ante el Universo todo. Sólo esa "Puti-Caverna" que vegeta en Madrid intentaba sin éxito mancillar tanta proeza. Siguen en ello.

Taciturno Cesc

Pero fue en ese verano post-Wembley cuando Guardiola cometió sus peores errores. En vez de fichar un central y un marciano arriba, se gastó una fortuna en un fajador como Alexis, y en repatriar a Cesc, que ya había gritado al mundo con la Roja que no soporta el banquillo, y lo que es peor, que no está dispuesto a disimularlo. Gran metedura sabiendo además que es el niño mimado de un Messi que ya había dejado la inocencia infantil al coronarse como Rey del Mundo, capitán de la albiceleste, y luego papá...

Lo de Tokyo fue el no va más

Los inicios de la temporada 2011-2012 fueron muy buenos, y de hecho Tokyo supuso la sublimación del “Modelo Barça”. Pero la MAFIA ya había dado orden de trincar la Liga. Cuando se llegó al Barça-Madrid decisivo los merenguitos ya habían salvado el culo en 5 ó 6 salidas por la gracia arbitral más indecente de las últimas décadas. Además Cesc ya llevaba meses restando, y sus suplencias provocaron chispas entre Messi y Pep. Se jodió el ambiente y la cosa pintaba mal. Aun así, sólo Fermín & Undiano S.A. y la potra de una contra aislada tras acularse en tablas como los toros mansos hizo que el Madrid ganara ese partido que finiquitó la maloliente Liga. Para colmo, un hechicero juguetón jodió la 5ª Champions ante el Chelsea.

Y nos plantamos este año, de nuevo sin fichar dinamita arriba ni un central imponente. Se acepta así depender de Leo al 90%, gran riesgo por muchas ganas que tenga de mostrarle al mundo que él es la clave de este equipo, con o sin Guardiola. Mientras Tito apostó por Cesc y se arrasaba en Liga y Copa, todo eran días de vino y rosas…

No creo que nadie repita 91 goles en un año

Pero en Milán y ante el Madrid  se recibieron dos crochet que mandaron a Cesc al banco, lo que activó una dinámica negativa con Messi jugando con el freno de mano, y que pareció provocar en capos del equipo algo así como… “Pues si tú no corres, yo no voy a correr por ti por mucho Messi que seas”. Y ahí es donde está el peligro. En que a Leo se la sude un título o un Balón de Oro más o menos, y que se centre en el Mundial de Brasil. Él mete goles como quien va a mear. Es algo fisiológico, y se llevará la Bota de Oro con la boina. Pero si pierde el hambre por mantener al Barça en la cima del mundo, se acabó la Era. El chute de excelencia ante el Milán y el reencuentro Villa-Messi han alejado algunos fantasmas. Pero sigo mosca ante posibles movidas por la suplencia de Cesc.

A ver si retorna ese espíritu infantil

La temporada puede consolidar al Barça como el innegable Rey de la Historia si gana otro Doblete de lujo. Pero la actitud de Messi es la llave de esa vitrina. No creo que haya mucha gente que haya escrito más loas a Leo que el abajo firmante. Me parece de gente sin intelecto compararle con nadie que no sea Pelé o Maradona. Pero mientras mantuvo su condición infantil, plasmó una obra que nadie ha igualado y dudo que nadie iguale, pues elevó a su equipo a la gloria eterna. La cosa es que lleva un año y pico obligado a sentirse adulto. Y aunque está dejando récords individuales para la eternidad, el Barça ganó un solo título menor el año pasado. Por eso me gustaría que Leo retornase a Never Land, porque sería el seguro a todo riesgo para mantener la hegemonía de este Barça. Y me pregunto: ¿Existe alguna pócima para devolver a Leo a su niñez?  ¿Alguien conoce al médico de cabecera de Peter Pan? ¡Que lo contraten ya!