REAL MADRID: LA MASCARADA

El Barça hizo un partido mediocre en Valencia, acorde a sus habituales bajones de Enero. No obstante, algún día se tendrá que denunciar esta rutina diabólica por la que marcar los tacos en los tobillos azulgrana docenas de veces forma parte de un paisaje cotidiano en el que, para colmo, las tarjetas se las lleva el Barça. En años como este se van a joder igual, porque el Barça apenas da pocas opciones. Por cierto, a ver si se enteran esos culés tragicómicos y moderan sus críticas al líder, que yo tampoco me jugaría las tibias en un torneo que está decidido.

Otra roja al limbo: Soldado clava los tacos a Sergio. Todo vale.

Porque la liga está finiquitada desde el mes de Noviembre. Y a los que les gustan los números para fardar de records, ese se lo deberían apuntar al Madrid de Mou, el único record real desde que llegó. Y es que el Real tiene un problema irresoluble: el Fútbol Club Barcelona. Y para esconder esa evidencia, uno que yo me sé ha fumigado una enorme cantidad de millones de euros ajenos en organizar una burda Mascarada que, año a año, va caricaturizando a su club ante el mundo. Y es que hace cinco años, el Barça, vía Guardiola, consiguió capturar en un solo frasquito las esencias más maravillosas de los últimos 20 años, desde el Dream Team hasta Ronaldinho. Y eso, con un Maradona non-stop como Leo Messi, se tradujo en un perfume tan embriagador, que la pelota cayó seducida, y nadie más ha sido ya capaz de birlarle esa chavala al Barça.

La Mascarada consiste en convencer al mundo de que la chica le pone los cuernos al Barcelona con el Madrid, pero que hay malvados jugadores azulgrana que lo impiden, en complicidad con los árbitros, Villar, Platini, Blatter… y hasta Obama. Naturalmente, semejante ópera bufa, en la era de la TV en HD y por satélite, estaba y está condenada al más estrepitoso de los fracasos desde el minuto uno, ese en el que, imagino yo, los gánster que la perpetran tuvieron su primera reunión en la penumbra para redactar el guion para cada escenario, los emolumentos para los sicarios mediáticos e institucionales, y la sordina a la excelencia azulgrana.

Lloroncete Siro... una caricatura humana

Señores, esto ya ha devenido en un zafio y absurdo esperpento. Todos hemos visto películas donde el malo es tan malo que no se lo cree ni dios. Pues bien, en nuestra Liga, ni haciéndolo a mala hostia parece posible diseñar un equipo como este Real Madrid de Florentino, ecoñado con el “como sea”, con el abuso, las malas artes, las crónicas perras, los ventiladores de falacias al por mayor, las locuciones de mequetrefes sin dignidad, y las tertulias de malnacid@s dispuest@s a todo para convencer a esa parte de audiencia fanática y “cortita” de que la realidad es la contraria a la que todo aficionado en sus cabales observa cada jornada. ¡Qué asquito de gente!

Eastá jodido birlarle la bola a estos...

¡Con lo facilito que es todo esto! Para jugar a fútbol como los ángeles hay un requisito que no te lo ahorra ni la madre que te parió: el arte en el manejo inteligente, hábil y técnico del balón. Y con ese arte se nace, porque no hay horas suficientes en 17 vidas para adquirir esa magia. Y el fúbtol en equipo se cuece en el medio campo. Pues bien, el FC Barcelona tiene el mejor centro del campo jamás visto, compuesto por Xavi, Iniesta, Busquets, Cesc y Messi... y cuando suben Piqué o Alba, pues la tocan como los ángeles. Y eso no se solventa sólo con Ozil, aunque apague el intermitente y se ponga en modo continuo. Y los urdidores de toda esta maraña creyeron que la solución, vía Mou, era explotar la peladura de cables de los Pepe o Ramos de turno, el rastrerismo sucio y vocacional de Arbeloa, y a ese Xabi Alonso que ya es un compendio de casi todo lo repudiable en un futbolista: guarro, lento, provocador e intrascendente… ¿Os enteráis Segurolas y Julios César Iglesias de este mundo? Se os llena la boca loando a vuestro irrelevante vasquito, que sólo es ya un puñetero abusón de su carnet de matarife sin sanción. No cuela.

Eso sí, la Mascarada sigue y seguirá mientras la pasta fluya. ¿Qué cobrará toda esa gente por redactar crónicas que califican de “limpio” el último clásico, partido en el que los leñadores hicieron 25 o 30 faltas aunque les pitaron 19, les perdonaron 2 rojas, y no pasaron del 35% de posesión? ¡Qué buche hay que tener para leer esos datos irrefutables, ver que aun así les hicieron 9 ocasiones de gol claras… y gritarle al mundo que las diferencias se han acortado!

Mou = Balones a la olla

¿Hay alguna diferencia entre el juego del Madrid en Granada y lo del año pasado ante Getafe, Mallorca, Valencia, Rayo Vallecano, Betis, Racing, Levante… etc.? La respuesta es obvia: ¡NOOOOOO! ¡Cuántos partidos como el de Granada la Liga pasada!, reducidos los blancos a meros comparsas buscando el fallo o el regalo, bombeando balones como cualquier equipo de media tabla en 3ª división. Simplemente la Mascarada incluía e incluye regalos mil en forma de penaltis no pitados, faltas a favor sacadas de la manga, tarjetas al limbo... y cientos de etcéteras. Y cuando a un  equipo millonario le das tanto, lo suele aprovechar. Pones a un Manolito Lama en tu vida, bautizas el bodrio de “Pegada”, y p’alante. Este año no le dan una patada a un bote tirando a puerta y el culito ha quedado al aire, con sus records de pega y su canesú.

Pues bien señores. ¡Voilà! Ahí tienen Vdes. “su equipazo” y su “plantillaza”. El retrato de sus vergüenzas resumido simplemente en resultados más o menos ajustados al juego, y digo más o menos porque la banda de Mou sigue disfrutando de trencillas de cámara. El último clásico copero se celebró solamente por el atraco previo a un Valencia que no marcó 3 en el Bernabéu porque a un silbato y dos banderines siniestros no les salió de los huevos permitirlo. 

Manda huevos este bocachanclas

Y como la zozobra es total, la mejor manera de maquillarla es tirar de hijoputez. El objetivo ahora es demonizar a Messi, asquerosa labor en la que toda esta chusma tiene menos futuro que Manolo Lama anunciando que “el Madrid te mata” más allá de Despeñaperros. Se rumorea que Pedrerol convocará a un ginecólogo merengue a ver si la mujer de Arbeloa dilató más de la cuenta por los supuestos insultos del conocido forajido Leo Messi en el parking. Y que le va a encargar al arquitecto el cálculo de la trayectoria parabólica del supuesto lapo de Messi al banquillo merengue. Curioso esputo ante el que no se ve reaccionar a nadie ni en el banquillo ni en la grada… Si las calumnias se pagaran con cárcel, muchos estarían limpiando los retretes de Alcalá Meco.

Este tío es un engendro

Luego están los otros “cruzados” anti Barça, los de Marca. Esos que, estando Pedro J. por medio, no sabes si han levantado la veda contra Mou vía Floren… o contra Floren vía no se sabe quién, que con Pedro J. nunca se sabe. Eso sí, el mismo día del ridículo en Granada, Marca TV, con Felipe del Campo, talibán de sonrisa falsa en TV y discurso de enfermo mental en radio, monta un video hijoputescamente vomitivo anti Messi, jugador que más hostias ha recibido sin quejarse en la historia de este deporte… Y anima al tal Látigo Serrano para llamarle cerdo a Leo… ¡Ay Látigo, qué mal te ha quedao! Que un proyecto de engendro como tú, a medio camino entre la putrefacción cerebral y la ambigüedad física, insulte al mejor de siempre, no te queda nada bien Muguelín. No sé por qué me recuerdas siempre el chiste en el que un joven le dice a su padre: 

- Papá tengo una noticia buena y otra mala que darte

- Dime primero la mala hijo

- Soy homosexual

- Joer hijo, lo llevaremos con discreción y ya está…¿Y la buena?

- Pues que me han nombrao Reina de las Fiestas… 

En fin amigos, el fútbol siempre ha sido de los superclase, y hace falta algo más que una panda de culitos de alquiler sin labia, sin cultura, sin prosa, y sin prestigio, para ensuciar algo tan grande como este Barça de Leyenda. La Mascarada sigue camino del retrete. Aunque todos los árbitros insulten al reglamento permitiendo  que inflen a patadas a loa blaugrana, el Barça domina siempre, y golea casi siempre, lo que rompe cualquier plan urdido en turbios cenáculos. Y el encumbramiento artificial del Real Madrid no ha colao, porque sigue siendo un equipo que no ha ganado a NADIE en diez años. Pero es que aunque gane, cuando fichas un tuercebotas como Mou, que odia profundamente todo lo que tenga que ver con la belleza en el fútbol, convierte la cosa en algo tan intrascendente que, gane lo que gane, sus equipos jamás dejan nada perdurable en la memoria. Es lo que hay: LA NADA NO DEJA RASTRO.