LAS PRIMAVERAS DEL BARÇA Y EL "BOMBO" DEL MADRID

La Primavera entra con fuerza, acompañando a un Barça en flor. Los botarates de la Caverna, e incluso algún otro atontao, se empeñan día si, día también, en comparar la inspiración con la coz, la pintura renacentista con la brocha gorda, o sea, el Barça con el Madrid, Messi con Cristiano. Sacan pecho a cada racioncita de optimismo resultadista que les da aire. Hoy voy a describir lo que, desde mi punto de vista, me sugieren la forma de jugar de ambos equipos y de sus dos máximas figuras. 

De entrada, pertenezco al grupo de amantes del fútbol arte al que estamos abonados aquellos a los que no se nos ha ido “la olla”, o sea, los que somos conscientes de que estas Sinfonías de Primavera que nos brinda este Barça bajo la batuta de Guardiola, son algo sublime, y probablemente irrepetible cuando esta camada de jugadores, liderados por Peter Pan Messi, dejen el fútbol.

Y conviene disfrutarlo con toda tranquilidad, pues lo difícil ya se ha hecho desde el momento en que este Barcelona ha alumbrado una Filosofía de Fútbol única y además basada en La Masía. Y gracias a Dios, a los astros, a los caprichos del destino, y sobre todo a la forma de trabajar del club, ha logrado la cuasi-imposible meta de culminar en títulos casi toda las competiciones que ha disputado, fulminando a los mejores equipos del mundo, y rubricando cada torneo con finales en las que ha regalado al mundo exhibiciones que  nadie podrá borrar jamás de la memoria de cientos de millones de personas. Así que la Caverna lo tiene crudo.

Incluso en la derrota, el Barcelona ha mostrado una superioridad insultante ante sus rivales, como bien se pudo ver en esa eliminación de Copa ante un Sevilla literalmente avasallado por un vendaval de fútbol azulgrana, en la demostración de fe ante un rácano Inter de Milán que se apoyó en un árbitro portugués para no ser despachado de acuerdo a su mediocridad, y en esa 2ª parte de la Final de Valencia en la que se bailó a un Madrid que tenía “licencia para matar”, expedida por ese “injuez” que es Undiano.

Y como guinda de ese “tratado de excelencia”, Leo Messi nos brinda cada temporada docenas y docenas de obras de arte. Lo que los Maradona, Mágico González, Cruyff, Romario, Ronaldinho o Ronaldo Nazario nos ofrecían en pequeñas dosis, a Leo le brota a borbotones, porque es el único que sigue jugando en el recreo, convirtiendo en realidad ante auténticos atletas profesionales las maravillas del más virtuoso de la clase en cualquier patio de colegio. Es TALENTO PURO plasmado en cientos de jugadas, goles y asistencias irrepetibles.

Por todo eso el Barça, ¡ahora si!, es mucho más que un club…¡Es un ESTILO! Y no hay un solo aficionado en el mundo que no lo identifique de inmediato. Aunque jugasen sin camiseta, tras 5 minutos viéndoles escucharías: ¡coño, pero si esos tienen que ser el Barça!    

Pasemos al capítulo Real Madrid. De momento, es un club que huye hacia adelante, con su deuda inamortizable como proa. Pretende arrebatar la supremacía azulgrana a base de fichar y fichar, y eso en cuanto a juego es imposible, porque el Barcelona es la Selección Campeona del Mundo más Messi, Mascherano (impresionante) y Alves…casi nada al aparato.

Hay quien pone cuernos...y quien los lleva puestos

Por si fuera poco, Florentino le ha dado el mando a uno de los tipos más despreciables como deportista que yo haya visto en mi vida…quizás porque no es un deportista, sino un mercenario vocacional obsesionado con quien le vence una y otra vez. Y toda esa fortuna puesta a su disposición solo se traduce, de momento, en una Copa del Rey in extremis en la que debió quedarse con ocho en el campo. 

La temporada pasada fue todo un tratado de zafiedad futbolística, culminada en los clásicos con Pepe como ancla en medio campo…Y este año, por más estupideces que leáis, es casi exactamente un replay del anterior. La gran diferencia no es futbolística, sino que la han marcado los árbitros y la puñetera suerte. Los de negro porque le han regalado literalmente puntos infames (Valencia, Mallorca, Getafe, Vallecas, Betis…) ¡Ni un penalti en contra tras 33 jornadas de Liga!, aunque todos sabemos que han hecho 8 o 10 como catedrales. Y comento lo de la suerte porque ayer me enteré por TV de que si los postes en los partidos del Barça y el Madrid hubieran terminado en gol, el Madrid iría…¡12 puntos por detrás del Barcelona!... Claro que eso a la “mass media” se la suda, porque son capaces de tildar de maravilla o de desastre el juego de un equipo dependiendo de si la bolita da en el palo o entra.

Pero analicemos al Madrid por líneas. En defensa podemos destacar que el Madrid se ha visto beneficiado porque Mou, exclusivamente por las circunstancias y en contra de su voluntad, no tuvo otra que colocar a Ramos de central. Eso ha mejorado el lateral derecho con un Arbeloa tan cumplidor como pisatobillos a tración, porque Ramos era un desastre en partidos clave, como lo demuestran sus humillaciones ante Ronaldinho, Henry ó Villa. Además Sergio va fenomenal por alto y saca el balón mucho mejor jugado que Carvalho. Pero dicho esto, si le hubieran sacado las rojas que ha ido pidiendo a gritos, el Madrid no iría líder ni por aproximación. Pepe es un Ultra Sur de habla portuguesa que anda suelto, lo cuál es un atentao contra  el fútbol y la razón. Le han sacado un % ínfimo de tarjetas respecto a las que merecía, comparable al % de efectividad de Jamoncito Pum tirando de lejos. Quien si que da un toque de distinción atrás es el jugador que más clase tiene para jugar el balón: Marcelo. Sin duda el mejor desatascador del equipo, aunque poco fiable en defensa. 

El Real Madrid no es identificable por un estilo propio. No tiene ningún centrocampista armador del juego, por mucho que pinten a Xabi Alonso como algo más que un voluntarioso sostén defensivo. Ayer se veía más clase en Diego o Arda que en las filas blancas. La línea de medios del Madrid, “a lo Mou”, es una maraña de músculo dispuesta a dificultar el juego contrario, que no a perder el tiempo en “tonterías” como jugar la pelotita. De ahí sus famosos trivotes, que no son más que su “tila especial” para evitar sustos. Porque cuando la urgencia de un partido le exige un poquito de dignidad futbolística vía Ozil o Granero, no le queda otra que quitar algo de musculito de la zona, y entonces sufre espasmos de canguelo viendo que su equipo se parte en dos mientras aparecen las ocasiones en contra.

Y llegamos a la delantera. Hace décadas que, a falta de otra cosa, nos bombardean una y otra vez con alabanzas a “la pegada”. Llevan presumiendo de eso y de porteros desde que me salieron los dientes. Eso vale para engañabobos, no para paladares ávidos de exquisitez. En este Madrid, el talento adelante solo la puede aportar Benzema, aunque es tan frío como intermitente. El Pipita y Cristiano son goleadores, que no es moco de pavo, pero poco más. Y los pongo a ambos al mismo nivel, ya que si los penaltis los tirase Higuain, sería éste el pichichi a pesar de jugar la mitad que el luso. 

Lo que me resulta obsceno es pretender equiparar a CR7 con Messi. En talento, compararles es directamente una blasfemia. Para grabar los goles estratosféricos de Leo necesitas un disco de muchos megas. El 90% de los de Cristiano son llegando al remate y desde dentro del área, muchas veces del área pequeña. De hecho, como lo suyo es la potencia y no la clase, falla muchos goles delante del portero, tirando al muñeco.     

Ese CR7 que hizo ayer en el Calderón el mismo partido que lleva haciendo una y otra vez. Por eso no  destaca ni el 20% de los partidos que juega. Hace siempre lo mismito: unos cuantos sprints a la contra, con bicicletas para engañatontos, sin driblar a nadie, para acabar centrando, o tirando desde donde le peta. Resulta que ayer, con Courtois al aparato, le fueron adentro. ¿Le hace eso ser mejor jugador? ¿No lleva toda la puta temporada haciendo lo mismo y tirando balones a la tribuna? ¿Tiene más clase porque ayer le coló dos tiros al belga y un penalti que si no bota se lo paran? ¿Se hubiera acordado alguien de su partido si se le van ambos chuts, hizo alguna jugada de mega crack? Simplemente está en racha, y lo que lleva fallando hasta hartar al Bernabéu, le entró en Pamplona y ayer. Punto. No hay nada más. Su única “especialidad” es la llamada “folha seca”, en la que, por cierto, tiene unos porcentajes muy por debajo de otros mejores que él en eso como Eder, Juninho Pernambucano…etc. Golpea de forma que el balón no da vueltas y hace extraños…Fenomenal. Pero como no hay manera de colocar, las más de las veces el balón acaba emigrando. Por eso solo lleva 2 goles de falta en toda la Liga, y uno de ellos de rebote…Será que chuta poquito el pobre chico. 

Y como contra el talento estratosférico de Messi no hay opción, se intentan agarrar a unos números de los que deberían huir para no entrar en depresión. Porque el rosarino lleva más goles y asistencias que nadie en el mundo. Lleva 240 goles en 320 partidos, en 8 temporadas, a 0,75 goles por partido, a pesar de dos temporadas capadas por lesiones importantes. CR7 lleva 261 goles en 10 temporadas, en 456 partidos (0,57 por partido). O sea, llevan casi los mismos goles, pero “Jamoncito Pum” ha necesitado 2 años y 136 partidos más para conseguirlo…¿De qué cojones presumen? Si hablamos de títulos, goles clave..etc., prefiero callarme porque me entra la risa floja. Y de carácter, humildad, naturalidad…etc,¿qué os voy a contar?. 

En resumen, esperemos que la justicia divina acabe de arreglar lo que la arbitral a emponzoñado. No hay prensa que, por muy vendida que esté, pueda equiparar las Primaveras del Barça de Messi al “bombo” de los arreones del Madrid de Cristiano. Ya sabéis el chiste: "Dice Cristiano a un grupo de gente: a mí me ha mandado Dios a la Tierra para ser el mejor del mundo...Y aparece Messi le responde: No mientas que yo no te he mandao a ninguna parte"

En fin, hace falta algo más que el cuádriceps de un narciso, un título de Liga adulterado, o un sorteo de verbena en Champions para tumbar una Leyenda…Y punto.